El futbolista fue suspendido y multado, tras romper el protocolo de sanidad en plena pandemia.

Según, información de el Francotirador del Diario Récord, Alan Mozo fue uno de los universitarios que recientemente dio positivo a las pruebas del virus SARS-CoV-2,por lo que, no fue convocado para enfrentar a Tigres.

A detalle, en la columna se revela que el contagio del lateral derecho de los Pumas, fue intencional: “Resulta que Alan, con el alma rebelde que se carga, estaba fastidiado ya del programa que le mandaron para bajar de peso, y para que lo dejarán descansar, días antes se la jugó para ser contagiado: agarró el cubrebocas de uno de sus compadres que ya había dado positivo, el de Alejandro Mayorga. Y se le cumplió, salió positivo”. 

Por si fuera poco, también se delata su indisciplina al no cumplir los protocolos impuestos por la Secretaria de Salud y acudir a una fiesta en plena pandemia: “La fiesta fue en casa de otro futbolista, y no de Pumas, sino del Cruz Azul: Pablo Cepellini … La fiesta fue el lunes después de los auriazules ante Mazatlán”.

A juzgar por la información, Mozo salió positivo esa semana y rompió las reglas de sanidad al acudir a dicha reunión llevando consigo la posibilidad de esparcir el virus.

A lo que, el Club Universidad Nacional decidió sancionar al jugador y así se lee en redes sociales: 

“Derivado de una indisciplina que rompe con los estatutos de sanidad internos, la directiva del club platicó con el jugador, Alan Mozo y se determinó la suspensión de un partido y hacerlo acreedor a una multa económica, de acuerdo a nuestro Reglamento Interno. 

Reiteramos nuestro compromiso con la disciplina, el desarrollo integral de los elementos de todas las categorías y el respeto a las indicaciones sanitarias”.

Ante dicha situación, Alan Mozo no participara en el duelo del próximo domingo 30 de agosto: Pumas vs Tijuana en el Estadio Olímpico Universitario.