En la última década, el F.C. Barcelona ha impuesto logros que muy pocos clubes en la historia han podido lograr. Este fin de semana, pudimos confirmar la hegemonía que ha impuesto el club catalán sobre el cuadro merengue, y no es para menos.

A pesar del dominio que ha tenido el Barcelona sobre el Real Madrid, nadie duda que el equipo de la capital de España es el mejor club de la historia de este deporte, ni más ni menos.

En una época en donde el Barcelona ha ganado un sextete y dos tripletes, el Real Madrid puede presumir y decir con orgullo que ha ganado 3 Champions League de forma consecutiva y 4 en los últimos 5 años.

La entidad catalana atraviesa un gran momento anímico de cara al cierre de campaña, en donde su máximo objetivo es ganar la «orejona» y así terminar el ciclo de victorias merengues en dicha competición y de la mano de un Lionel Messi muy inspirado, todo puede pasar.

El cuadro de Ernesto Valverde cuenta con un gran equilibrio en todas las líneas del campo; un Ter Stegen que sigue confirmando que es hoy por hoy uno de los mejores arqueros del planeta, Piqué que ha ido a la alza en su desempeño futbolístico cuando más se le necesita, Rakitic confirmando que es un jugador de clase mundial y que muchos de nosotros no lo valoramos como se debe y claro, un Lio Messi en mejor forma que nunca.

LaLiga parece estar en la bolsa para el Barcelona, en la Copa del Rey están instalados en la final tras haber superado al cuadro del Real Madrid, no con superioridad, si no con certeza y aprovechando las oportunidades que tuvieron. La única competencia que sigue en espera es la Champions League, competencia en la que tiene que mostrar un mejor juego por el tipo de rivales que se puede ir encontrando en el camino.

Las únicas dudas que pueden surgir son en jugadores que se ha invertido mucho dinero y han quedado a deber en su rendimiento en la cancha; nos referimos a Philippe Coutinho. El brasileño denota incomodidad en el terreno de juego, no luce su futbol y por momentos puede llegar a estorbar en la elaboración de juego.

En Barcelona saben la importancia de volver a ganar la Champions League, es el objetivo número uno de la temporada, con ello, volverían a demostrar su poderío en toda Europa y, sobre todo, ante el Real Madrid.